"La calle no es ni buena ni mala; hay que saber cruzarla"

viernes, 25 de noviembre de 2011

Experiencia en Sucre

El otro día os hablé de la experiencia en Ocurí. Hoy quiero llevaros hasta la ciudad de Sucre para que podáis conocer la realidad de los niños trabajadores de Bolivia en donde la educación queda por completo, en un segundo plano.

Son miles y miles los niños que no reciben educación en Bolivia. Trabajan limpiando zapatos; transportando ladrillos; vendiendo periódicos o ayudando a sus madres en el mercado. Aunque la política de Evo morales a alfabetizado a gran parte de la población que era analfabeta, el camino que queda por recorrer es todavía una meta que se visualiza muy a lo lejos.

Como ya lo comenté cuando inauguré este blog, la ONG IPTK tiene un proyecto enfocado a estos niños bolivianos. Se trata de una escuela móvil que acoge a todos estos niños trabajadores. La escuela consiste en una furgoneta llena de material escolar que va moviéndose por diferentes barrios de la ciudad de Sucre: cada día un barrio diferente. Tiene una doble función principal: por una parte, ofrecerles una enseñanza básica; por otra, hacer que el niño sea niño, aunque sólo sea por un instante. Por ello, la metodología utilizada es en gran parte, la realizada a través de juegos.
Me gustaría quedarme un instante en este contexto e intentar haceros sentir parte de esta experiencia tan significativa. Me gustaría que sintierais la magia que se siente al ver una interacción tan hermosa. 

Tan sólo una escuela de una vez a la semana; tan sólo eso, nada más.

Me preguntaba, al principio, como podía ser tan significativo el aprendizaje en un tiempo tan reducido. Más tarde me dí cuenta que para muchos de esos niños era el único momento a la semana de relacionarse con otros niños desde esa altura: la de niño. Era el único momento en toda la semana en el que el niño era niño.

Y entonces comprendí que el objetivo de este proyecto iba mucho más allá que alfabetizar a las personas.


ESTA ESCUELA ES LA ESCUELA DE LA VIDA.


2 comentarios:

  1. Que gran experiencia!
    se nos hace dificil de esta prespectiva del mundo "rico", pensar que en el otro lado del charco hay niños que no tienen, como bien dices, sitio, tiempo, oportunidad para ser lo que son:niños!

    Maddi, un blog lleno de vivencias. Estoy segura que para tí también fue, tal y como es para ellos, la escuela de la vida.

    Buena oportunidad para hacer ver al mundo ciego que hay muchas cosas más allá de nuestro ombligo!

    ResponderEliminar
  2. Kaixo Amaia!

    Realmente fueron unos meses mágicos y llenos de emoción. Todo el mundo debería probar la escuela de la vida para aprender realmente, a vivir.

    Gracias por seguir mi blog!

    un abrazo!

    ResponderEliminar